Guía de seguridad de tu bolsa de agua caliente
Aunque este invierno estemos deseando abrazar nuestra bolsa de agua caliente, es fundamental mantener la seguridad cuando la usemos. Sigue leyendo para descubrir nuestros consejos y trucos.
Primero, lee atentamente la etiqueta de advertencia y guarda el embalaje para futuras consultas.
Este año, encontrar nuevas formas de estar calentito es más importante que nunca, así que queremos ayudarte a conocer el protocolo correcto de las bolsas de agua caliente.
Las bolsas de agua caliente pueden resultar muy peligrosas y causar lesiones si se utilizar o almacenan incorrectamente, así que sigue leyendo para descubrir nuestras guías paso a paso y aprender a llenar y usar la tuya de forma adecuada, así como para conocer las contraindicaciones fundamentales que debes tener en cuenta.
Cómo llenar y usar adecuadamente una bolsa de agua caliente
Antes de empezar: asegúrate de disponer de espacio y tiempo suficientes para llenar la bolsa de agua caliente y mantén a los niños pequeños alejados del lugar donde te encuentres.
Comprueba siempre que la bolsa y el tapón no estén dañados antes de usarlos.
Cuando llenes la bolsa de agua caliente, es fundamental que no uses agua hirviendo, por mucho frío que tengas. Hierve el agua y deja que se enfríe durante unos minutos antes de llenar la bolsa.
No llenes la bolsa directamente con los sistemas de agua caliente domésticos, ya que esto puede reducir de forma considerable la vida útil de la bolsa de agua caliente.
Sujeta la bolsa por el cuello en posición vertical y llénala poco a poco para evitar que el agua caliente te salpique.
Asegúrate de que solo llenas hasta un máximo de dos tercios de la capacidad o menos. No la llenes en exceso.
Extrae el aire de la bolsa colocándola con cuidado sobre una superficie plana hasta que el agua aparezca por la abertura.
Enrosca el tapón lo suficiente para que no haya fugas.
Cuando la bolsa esté llena, la funda debe cerrarse fácilmente con el corchete. Si no se puede cerrar, hay que quitar un poco de agua, ya que esto significa que está demasiado llena. La funda debe ajustarse perfectamente.
Usa siempre la funda que acompaña a la bolsa para evitar lesiones.
Vaciar y almacenar adecuadamente tu bolsa de agua caliente
Colócala en el fregadero y retira con cuidado el tapón.
Vacía el agua en el fregadero poco a poco para evitar salpicaduras.
Cuando no la uses, escúrrela completamente antes de guardarla.
Almacénala en un lugar fresco, seco y oscuro, y evita la exposición directa a la luz solar.
Evita el contacto con superficies calientes.
Evita el contacto con aceites y grasas.
No coloques nada sobre la bolsa durante el almacenamiento.
Contraindicaciones de la bolsa de agua caliente
Las bolsas de agua caliente no son aptas para menores de 36 meses ni para personas demasiado sensibles al calor.
Es necesaria la supervisión de un adulto durante el uso de este producto.
No la pongas en contacto directo con la piel ni la uses durante periodos de tiempo prolongados. Las bolsas de agua caliente deben usarse siempre con la funda que incluyen. Desde modelos con estrellas hasta estilos aterciopelados supersuaves: protegerse nunca ha sido tan agradable.
Bajo ninguna circunstancia se puede usar la bolsa de agua caliente como cojín ni como asiento.
Cómo descubrir cuántos años tiene tu bolsa de agua caliente
Se recomienda reemplazar la bolsa de agua caliente cada dos años. Además, consultar la fecha de fabricación de la bolsa nunca había sido tan fácil. Basta con que te fijes en la marca de la margarita que aparece en el cuello de la parte de goma de tu bolsa de agua caliente. En el capullo de la margarita aparece el año de fabricación, los pétalos representan los doce meses del año y los puntos de cada pétalo representan las cuatro semanas del mes.
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